¿Cómo se extraen los óvulos?

La extracción de los óvulos es lo que a las pacientes más les preocupa en todo el proceso de la Fecundación In Vitro. Generalmente cuando explicas en que consiste el ciclo y comentas la estimulación, la transferencia embrionaria, la fecundación… asienten, preguntan alguna duda pero todo va viento en popa. Pero cuando entras en la punción ovárica y les dices que es preciso pinchar los ovarios para extraer los ovocitos, que tienen que entrar en quirófano, que se utiliza anestesia… es cuando la paciente te dice: para y rebobina… ¿Cómo que tengo que pasar por quirófano? ¿Eso duele? ¿Es muy complicado? ¿Que me puede pasar?

huevos in vitro

La punción ovárica es el momento puntual más complicado para la paciente, aunque no deja de ser un acto quirúrgico sencillo. La inmensa mayoría de punciones no tienen complicación alguna, y la evolución de la misma cursa sin ningún contratiempo.

Consiste en pinchar los ovarios con una aguja atravesando la pared vaginal posterior mediante visión ecográfica. Esto significa que vamos a utilizar la sonda vaginal del ecógrafo a la que acoplaremos una guía para la aguja de punción. Esta guía no es más que un accesorio que nos permite determinar la dirección de la aguja, y saber en todo momento hacia donde se va a dirigir, viéndolo además por ecografia. Esto hace que en todo momento podamos ver donde estamos y evitar así la punción de estructuras vecinas, y complicaciones posteriores.

Dentro de las complicaciones la más frecuente es el sangrado. El sangrado puede ser vaginal (hacia fuera por daño en los vasos sanguíneos que irrigan la vagina) o abdominal (cuando el sangrado es hacia dentro y no se ve). Habitualmente la hemorragia suele ser autolimitada y sin ninguna repercusión. Puede aparecer en un 10-15% de las punciones pero no tiene mucha importancia. Las hemorragias importantes con complicaciones son extremadamente raras (1/100.000).

Efectos secundarios de la anestesia, molestias abdominales, pequeños sangrados vaginales… Son más o menos frecuentes, pero como digo, autolimitados.

A diferencia de los inicios de la Fecundación In Vitro que la recuperación ovocitaria se realizaba mediante laparoscopia y posteriormente en los años 80 mediante ecografía abdominal atravesando la vejiga, hoy en día, la punción vaginal convierte la punción ovárica en un acto sencillo y con escaso riesgo de complicaciones.

La duración del acto quirúrgico oscila entre 5-15 minutos dependiendo del número de folículos que sea preciso puncionar. No obstante, entre el ingreso previo, coger la vía para la administración de la anestesia, realizar la punción y el despertar posterior con la comprobación de tolerancia a alimentos nos llevará entre 60 y 90 minutos de ingreso. Aunque se puede realizar con anestesia local (normalmente bastante doloroso) o epidural (la recuperación tarda varias horas) generalmente se utiliza una sedación que evita sentir dolor y su acción y recuperación es rápida, evitando así ingresos largos siendo más cómodo para la paciente.

Resumiendo: a pesar de tener que pasar por quirófano, nos encontramos frente a un paso relativamente sencillo en todo el proceso de la Fecundación In Vitro.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *